Este jueves 8 de mayo, el cónclave para elegir al nuevo papa continúa en la Capilla Sixtina del Vaticano, después de que la primera votación del miércoles no alcanzó los dos tercios requeridos (89 de 133 votos) para designar al sucesor de Francisco.
Los cardenales celebrarán dos rondas de votación por la mañana y dos por la tarde. Si eligen al nuevo pontífice, el mundo lo sabrá gracias al humo blanco que saldrá desde la chimenea vaticana, alrededor de las 03:30 o 10:30 (hora de Ecuador). Si no, se repetirá el humo negro.
La ceremonia se desarrolla en completo secreto, pero se conoce, gracias a la Constitución Apostólica Universi Dominici Gregis, que cada cardenal, al emitir su voto, debe declarar solemnemente en latín: “Pongo por testigo a Cristo Señor, el cual me juzgará...”.
En la jornada del miércoles 7 de mayo, el humo negro que salió a las 21:01 (hora local en Roma) confirmó que no hubo consenso. Mientras tanto, medios especializados y creyentes siguen con atención las señales del Vaticano, donde reina un ambiente de esperanza.
Este cónclave es clave para el futuro de la Iglesia católica, que cuenta con más de 4.000 millones de fieles en todo el mundo. La atención está puesta en quién será el nuevo líder espiritual global.